Los farmacéuticos cordobeses hemos tenido la oportunidad de mejorar nuestras destrezas en el abordaje de la insuficiencia cardiaca y el manejo de las algunas de las últimas opciones terapéuticas para el control patología de la mano del curso ‘Actualización en Insuficiencia Cardíaca’, organizado en colaboración con Novartis.
En los últimos años hemos asistido a un progresivo interés por esta dolencia dado que se trata de un problema de magnitud creciente, debido en parte al envejecimiento de la población y también a la existencia de nuevos y más efectivos tratamientos para ciertas enfermedades de corazón que conlleva a que algunos enfermos, sigan viviendo con una función cardiaca deteriorada.
La supervivencia media de los pacientes con grados avanzados de insuficiencia cardiaca es menor que la de muchos tipos de cáncer. En concreto, en el curso se detalló que el 10% de los pacientes fallecen a los 30 días tras la hospitalización, el 20% al año de la hospitalización el 50% a los 5 años.
La insuficiencia cardiaca es una enfermedad progresiva que se caracteriza por presentar cuadros agudos, con altas tasas de hospitalización y elevada mortalidad.
Algunos de los síntomas más frecuentes son la disnea, la ortopnea (dificultad para respirar al estar acostado), la disnea paroxística nocturna, la disminución de la capacidad para tolerar el ejercicio, el edema o la fatiga, entre otros.
La presión venosa yugular elevada, la taquicardia, el cansancio o la falta de aire son algunos de los signos más identificativos de esta dolencia. A veces se puede llegar a sufrir un encharcamiento de pulmones, así como también hinchazón de los tobillos, de piernas y del abdomen, derivada por la retención de líquidos.